OMIS
En tu mirada. Silenciosa y expansiva. En tu risa con hoyuelos asesinos. Un amigo intenta creer en el destino para explicar tu repentina cercanía. A unas cuadras de mi exilio construido. Yo me oculto, finjo obviarte y vuelvo a verte. En un cuerpo que derrite al oprimido como el sol al chocolate. Y me arruinas …