(88:04) Me encuentro volando y me pierdo en mí mismo, en mi seguridad.
Walay es un primate color noche. Quizá uno de los más detestables seres sobre la faz de la tierra. Ha realizado dos ataques el sólo y ahora, se viene recuperando de un picotazo que le dio mi hermano el gavilán.
(88:06) Estupidez o valentía, los monos han venido a nuestra tierra, pero éste es mi momento.
El ropal, el único sobreviviente de las masacres anteriores, vuela a mi lado. Quizá la confianza que las otras aves tienen en mí es lo que me da fuerza para volar más alto.
(88:08) ¿De qué diablo estoy hecho para que me cedan el ataque?
Mucho tiempo estuve lejos del nido, mucho tiempo lejos de mi hogar; viví entre brujas y duendes y hoy, hoy regreso a casa. Nuestra comunidad está siendo asechada por el amor que estos seres subnormales le tienen a la destrucción masiva.
(88:09) He dejado los pensamientos a un lado y es oportuno atacar.
Nos movemos todas las aves. Todas las razas, todas las sangres y un objetivo. Los monos tratan de defenderse, los hemos acorralado.
El macho alfa avanza asustado, pero mi sombra cubre su sombra y mis plumas están cayendo ahora sobre su piel.
(88:10)